Pensar que el cine es para todo público es incorrecto, aunque sí existe cine para todo el mundo y en él, el cine de arte y ensayo que vale señalar, resulta un tanto ambiguo. Esto se debe a que desde un principio cuando vamos por una película, todos podemos definir de qué se trata, si es de guerra, de amor, terror, pero no sucede de esta forma cuando se trata de una película de arte y ensayo.
En el medio fílmico, podemos encontrar personas que lo definen como filmes que contienen una acabada factura o quizás, que apuestan por una manera de transmitir ideas que son más elevadas, pues estas no son posible de encontrar al alcance de la comprensión de todo espectador. Mientras, para otros la clave se encuentra centrada en una escasa distribución que contribuye a su carácter minoritario; y no deja de existir, ese que directamente enlaza a esta línea del cine con esos filmes que solo llaman a los bostezos de un aburrido público.
En todo caso, es posible que podamos encontrar de todo un poco. Incluso se podría afirmar que cada uno de nosotros en algún momento hemos acudido a alguna sala de cine para ver una película de estas, tan solo por agradar a determinada persona, o nos hemos sentado en alguna pequeña sala de cine esperando a descubrir cierta maravilla del séptimo arte que es desconocida.
La década de los setenta, fue una época particularmente proclive a este tipo de películas, por lo que no esta demás, hacer mención de algunas de ellas, quien sabe si nos animamos a sentarnos en nuestra mejor butaca a disfrutar de ellas en algún momento.
Dersu Uzala, el cazador enigmático
Dersu Uzala es un film de 1975. Se trata de una coproducción soviético-japonesa, siendo la primera película realizada en el extranjero por su director, Akira Kurosawa, con ella logró obtener diversos galardones que incluyen un Óscar a la mejor película. Este es un filme, que casi por completo fue rodado en Siberia, y hace referencia al respeto y la amistad entre personas que son de etnias diferentes. También nos acerca a la decadencia del ser humano cuando se enfrenta a sus mayores temores.
Novecento, excesos a tutiplén
El mundo logra reconocer a Bernardo Bertolucci como un cineasta de referencia gracias a las más de cinco horas de este film que dan para mucho. Novecento se dio a conocer en 1976, y contaba con un destacado reparto que incluía a Robert de Niro y Gérard Depardieu a la cabeza. En él se explica cómo era la vida en Italia en el transcurso de la primera mitad del siglo XX.
Muerte en Venecia, decadentismo y Mahler a mansalva
Muerte en Venecia es un film de 1971, y sobresale como la enésima demostración del inmenso talento para la dirección que posee Luchino Visconti. Es una película basada en la novela homónima de Thomas Mann, y la cinta viene a constituir una reflexión en relación a la belleza como ideal estético y la paulatina pérdida de la juventud y la vida en el plano ético.